- Las empresas españolas son optimistas, en cuanto a su nivel de digitalización: el 84,8% señala que dispone de un nivel de digitalización medio o alto.
- Los mayores obstáculos para la digitalización se vinculan a la burocracia existente en la colaboración público-privada (52,2%) y la falta de tiempo para dedicar a las actividades de digitalización (42,8%).
- Para las empresas, la digitalización influye especialmente en la imagen de marca y reputación, en la relación con los clientes y otras empresas, en la innovación y en la productividad de la compañía
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Madrid, 20/08/2024.- Las empresas españolas son optimistas respecto a su nivel de digitalización, según un nuevo estudio del Observatorio de Competitividad Empresarial de la Cámara de Comercio de España. El 85% considera que su nivel de digitalización es medio o alto, y la mitad (50,7%) cree que ha mejorado desde la crisis sanitaria de 2020. Además, las empresas españolas creen que la formación en Tecnologías de la Información y la Comunicación (TICs) de sus empleados es crucial para el desarrollo empresarial. Las áreas de formación más valoradas incluyen la ciberseguridad y las soluciones de gestión empresarial (factura electrónica, cloud computing, soluciones móviles) y presencia online (marketing digital, analítica web).
Sin embargo, el informe también revela una serie de obstáculos que frenan su progreso en términos de digitalización. Estos se dividen en tres categorías principales:
- Relación con las AAPP: La burocracia en las relaciones con la Administración (52,2%) es el principal obstáculo mencionado. La falta de incentivos públicos (25,6%) y una e-Administración incompleta (20,4%) también se identifican como impedimentos.
- Entorno y clientes: El nivel de conocimiento digital de los clientes (29,1%) y el aumento de los costes de inversión (27,1%) son los principales obstáculos externos. La seguridad y privacidad digital (17,7%) y la falta de estándares internacionales (9,2%) también preocupan a las empresas.
- Factores internos: La falta de tiempo para dedicarlo a la digitalización (42,8%) es el obstáculo interno más significativo. La falta de recursos financieros (26,1%) también es una limitación importante.
Con todo, las empresas españolas planean seguir invirtiendo en su transformación digital. Las áreas prioritarias incluyen el equipamiento informático (64%), el uso de internet para transacciones (63,8%), la seguridad y privacidad digital (62,1%), y la conectividad móvil a través de smartphones y tabletas (60,4% y 55%, respectivamente).
La inversión en presencia online también es considerada una prioridad por las empresas y casi el 80% consideran que la información y promoción a través de una página web corporativa será un destino probable de sus recursos.
En el otro extremo, la venta online de productos y servicios parece ser el área menos atractiva para la inversión y el 57,8% de las empresas lo considera poco probable como destino de sus inversiones en digitalización.
Efectos de las TICs en la actividad empresarial
A la hora de considerar en qué ámbitos influye más positivamente la digitalización, las empresas consideran que es en la imagen de marca, reputación, transparencia y capacidad de promoción. A continuación, le sigue de cerca la capacidad de influencia de la digitalización en la relación con los clientes y con otras empresas (proveedores, gestorías, etc.). La innovación y la productividad también están estrechamente ligadas con el nivel de digitalización, a juicio de las compañías. Para todos estos aspectos de la actividad empresarial, las empresas conceden a la digitalización una capacidad de influencia de entre 3,8 y 3,5 puntos, sobre un máximo de 5.
